Una persona no vale por sus éxitos, sino por las veces que se ha levantado de sus fracasos.
•El agua bebida a morro es como quita la sed.
“Durante mi presentación de piano, yo ví a mi papá en la platea levantando su mano y sonriendo. …Era la única persona haciendo esto, y ya no sentí miedo” Marcela, 8 Años.