-25% solo aquí
Masajes en la oreja para la vida mejor. Auriculoterapia.
March 17, 2009 | Posted by Instituto Vital
El masaje en la oreja, tan placentero, puede ser una excelente terapia para la vida mejor, principalmente para enfermedades crónicas. Esto es la auriculoterapia.
La oreja, si la observas detenidamente, tiene forma de feto invertido. Esta particularidad hizo pensar a los chinos que podía relacionarse directamente con la salud y su tratamiento.
March 17, 2009 | Posted by Instituto Vital
El masaje en la oreja, tan placentero, puede ser una excelente terapia para la vida mejor, principalmente para enfermedades crónicas. Esto es la auriculoterapia.
La oreja, si la observas detenidamente, tiene forma de feto invertido. Esta particularidad hizo pensar a los chinos que podía relacionarse directamente con la salud y su tratamiento.
Desde hace 5,000 años, se ha investigado en China este hecho, igualmente en la antiguedad se ha utilizado la auriculoterapia en Egipto, Grecia, Roma y recientemente en Europa, principalmente en Alemania, Italia, Francia y España.
Con aparatos electrónicos se ha podido determinar que las antiguas culturas tenían toda la razón. Hoy, es una de las mejores terapias complementarias a la acupuntura corporal, siendo indispensable que el médico tradicional chino aplique agujas permanentes por varios días para mayor efectividad de la mayor parte de patologías.
Debajo encontrarás un mapa para auriculopuntura que te dará los puntos o zonas en las que se encuentran las diferentes partes, sistemas y órganos del cuerpo.
Con aparatos electrónicos se ha podido determinar que las antiguas culturas tenían toda la razón. Hoy, es una de las mejores terapias complementarias a la acupuntura corporal, siendo indispensable que el médico tradicional chino aplique agujas permanentes por varios días para mayor efectividad de la mayor parte de patologías.
Debajo encontrarás un mapa para auriculopuntura que te dará los puntos o zonas en las que se encuentran las diferentes partes, sistemas y órganos del cuerpo.
