La Catedral de Chartres recibe cada año una peregrinación de jovenes convertida en todo un simbolo de esperanza. Es un mundo de contrastes como el nuestro, no podemos pasar por alto la profunda religiosidad de muchos adolescentes, abierta a la llamada de los mas nobles valores del espiritu.
Soñaba el ciego que veia, y soñaba lo que queria.