Quisiera que este sufrimiento mio ayudara A los demás,
Quisera que mi sonrisa, A pesar de todo iluminase A los demás
A tal punto que los induzca A cambiar de vida,
Quisera que mis ojos, reflejando la profundidad
de mi sufrimineto inspiraran buenos sentimientos,
Y, ¿POR QUÉ NO POESIA?
Quisiera ser ejemplo para todos
y desearla que todos comprendieran
y además, A veces aplaudieran!
La verdad,
¡Ay de mi! es bien distinta
El sufrimiento se refleja en mi cara
porque es indecoroso,
Mi sonrisa, A pesar de todo, es dada por descontada
y asombra a los demás cunado no aparece,
Mis ojos expresan dolor y, en vez de poesia,
inspiran incomodidad O fastidio,
O, en el mejor de los casos, piedad!
Frecuentemente el modelo que doy
es más bien una muestra de impaciencia,
de arrogancia, de rencor, no, nadie me aplaude,
debo ser consciente que este dolor es asunto mio
y es sólo en mi misma que debo buscare aprobación,
Pero igualmente debo darme cuenta
que lo que yo pueda encontrar en mi,
es tal vez, lo más precioso
que hoy pueda conseguir:
La Verdad!
¿dónde está la verdad?
¿Es mi corazón el que me ha traicionado,
O soy yo quien a traiconado a mi alma?
Señor, dame tiempo,
para realizar aquello que no he echo,
Para dar aquello que no he dado,
para decir aquello que no he dicho
Señor, dame entendiemiento
para encontrar en mi la verdad!
Quisera que mi sonrisa, A pesar de todo iluminase A los demás
A tal punto que los induzca A cambiar de vida,
Quisera que mis ojos, reflejando la profundidad
de mi sufrimineto inspiraran buenos sentimientos,
Y, ¿POR QUÉ NO POESIA?
Quisiera ser ejemplo para todos
y desearla que todos comprendieran
y además, A veces aplaudieran!
La verdad,
¡Ay de mi! es bien distinta
El sufrimiento se refleja en mi cara
porque es indecoroso,
Mi sonrisa, A pesar de todo, es dada por descontada
y asombra a los demás cunado no aparece,
Mis ojos expresan dolor y, en vez de poesia,
inspiran incomodidad O fastidio,
O, en el mejor de los casos, piedad!
Frecuentemente el modelo que doy
es más bien una muestra de impaciencia,
de arrogancia, de rencor, no, nadie me aplaude,
debo ser consciente que este dolor es asunto mio
y es sólo en mi misma que debo buscare aprobación,
Pero igualmente debo darme cuenta
que lo que yo pueda encontrar en mi,
es tal vez, lo más precioso
que hoy pueda conseguir:
La Verdad!
¿dónde está la verdad?
¿Es mi corazón el que me ha traicionado,
O soy yo quien a traiconado a mi alma?
Señor, dame tiempo,
para realizar aquello que no he echo,
Para dar aquello que no he dado,
para decir aquello que no he dicho
Señor, dame entendiemiento
para encontrar en mi la verdad!
