En el pueblo era costumbre de pedir y dar "el aguinaldo" durante las fiestas de Navidad y más el día de Año Nuevo.
Los niños y niñas salían a pedir los aguinaldos con gran ilusión con nieve o con sol salían a recorrer las calles del pueblo casa por casa, siguiendo una antigua costumbre que habían visto practicar a sus hermanos mayores, cantando letras también tradicionales como ésta:
Aguinaldos, aguinaldos,
Dios nos dé buen año,
arcas de trigo, perniles de tocino.
Al llegar ante la puerta de cada casa se cantaba sin interrupción y tanto más fuerte cuanto más tardaban en abrir la puerta. Las mujeres de la casa generosas, dejaban entrar a los niños al portal de la casa y distribuían frutas, dulces, naranjas, frutos secos o unas cuantas pesetas. Ordinariamente daban frutas típicas de Navidad o de los que se recolectaban en el pueblo: nueces, pasas de ciruela, higos, castañas, galletas, caramelos, chocolate y otros dulces.
Los niños y niñas salían a pedir los aguinaldos con gran ilusión con nieve o con sol salían a recorrer las calles del pueblo casa por casa, siguiendo una antigua costumbre que habían visto practicar a sus hermanos mayores, cantando letras también tradicionales como ésta:
Aguinaldos, aguinaldos,
Dios nos dé buen año,
arcas de trigo, perniles de tocino.
Al llegar ante la puerta de cada casa se cantaba sin interrupción y tanto más fuerte cuanto más tardaban en abrir la puerta. Las mujeres de la casa generosas, dejaban entrar a los niños al portal de la casa y distribuían frutas, dulces, naranjas, frutos secos o unas cuantas pesetas. Ordinariamente daban frutas típicas de Navidad o de los que se recolectaban en el pueblo: nueces, pasas de ciruela, higos, castañas, galletas, caramelos, chocolate y otros dulces.