Vuela pensamiento, con alas doradas,
pósate en las praderas y en las cimas
donde exhala su suave fragancia
el aire dulce de la tierra natal!
¡Saluda a las orillas del Jordán
y a las destruidas torres de Sión!
¡Oh, mi patria, tan bella y abandonada!
¡Oh recuerdo tan grato y fatal!
Arpa de oro de los fatídicos vates,
¿por qué cuelgas silenciosa del sauce?
Revive en nuestros pechos el recuerdo,
¡háblanos del tiempo que fue!
Canta un aire de crudo lamento
al destino de Jerusalén
o que te inspire el Señor una melodía
que infunda virtud al padecimiento.
que infunda virtud al padecimiento.
que infunda virtud al padecimiento.
virtud al padecimiento.
pósate en las praderas y en las cimas
donde exhala su suave fragancia
el aire dulce de la tierra natal!
¡Saluda a las orillas del Jordán
y a las destruidas torres de Sión!
¡Oh, mi patria, tan bella y abandonada!
¡Oh recuerdo tan grato y fatal!
Arpa de oro de los fatídicos vates,
¿por qué cuelgas silenciosa del sauce?
Revive en nuestros pechos el recuerdo,
¡háblanos del tiempo que fue!
Canta un aire de crudo lamento
al destino de Jerusalén
o que te inspire el Señor una melodía
que infunda virtud al padecimiento.
que infunda virtud al padecimiento.
que infunda virtud al padecimiento.
virtud al padecimiento.