Un carbonero que hacía su trabajo en cierta casa visitó a un batanero que trabajaba no muy lejos de él, invitándole a trabajar en un mismo local, pues de este modo, además de mayor amistad vivirían con menos gastos al usar solamente una casa. Pero le respondió el batanero:
-Eso para mí es imposible, pues todo lo que yo blanqueara, tu lo ennegrecerías de hollín al instante.
No debemos asociar actividades de naturalezas contradictorias.
-Eso para mí es imposible, pues todo lo que yo blanqueara, tu lo ennegrecerías de hollín al instante.
No debemos asociar actividades de naturalezas contradictorias.
Me voy a dar una vueltecilla, para ver como va el personal.
En un rato, vuelvo.
Hasta ahora.
En un rato, vuelvo.
Hasta ahora.
Hasta luego Pepepaco, yo tambien me marcho,