Anécdota de Valle Inclán: Don Ramón María, ¿es cierto que usted es feminista?
No señorita, lo que yo soy es mujeriego.
No señorita, lo que yo soy es mujeriego.
19. No comenzar con demasiada expectación. Es un chasco frecuente ver que todo lo que recibe muchos elogios antes de que ocurra no llegará después a la altura esperada. Lo real nunca puede alcanzar a lo imaginado, porque imaginarse las perfecciones es fácil, pero es muy difícil conseguirlas.