Conserva sus
iglesias en los dos
barrios. La del principal está dedicada a
San Martín, obispo. Tiene la cabecera renacentista con
bóveda de crucería y el resto con
bóvedas encamonadas, sobre cuatro
columnas, con tres naves. El
ábside es rectangular con contrafuertes. La
portada es clasicista, de medio punto con impostas y molduras, pilastrones moldurados y friso, bajo alto
arco de medio punto. Y la
torre es en
espadaña de tres cuerpos, rematada en
frontón, bolas, pináculos y
cruz, sobre la
puerta, con tres huecos, y dos
campanas.
La
pila es
gótica lisa; y el
retablo mayor es barroco. Guarda la imagen de una
Virgen sedente gótica: “Virgen de Villasuso”, conocida como “La Pasiega”, por su característica de Divina Pastora.
Y la del otro
barrio, conocido como Quintana-
Palacio, está dedicada a San Ildefonso. Es de una nave con
capillas en cruz latina, con gran ojo de buey y
aleros moldurados en toda la
iglesia. El ábside es rectangular con contrafuertes en
esquinas. La portada tiene arco de medio punto con dovelas sencillas.
Y la torre es una esbelta espadaña, de dos cuerpos, rematada en pináculos, recrecida con estructura para el
reloj y un gran pináculo, con dos huecos y dos campanas.
Sus libros parroquiales comienzan el año 1622.
Y en sus tierras está catalogado un yacimiento arqueológico
Romano con restos también
Medievales y otro posiblemente
Medieval.