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Fuente de zanca en un antiguo pozo, LA PRADA

En el sector norte del valle de Tobalina, al abrigo de la prolongación de la Sierra de Arcena, en una carretera que recorre todo el norte del valle y
en terreno llano, está situado LA PRADA, a 40 km de Villarcayo y 87 de Burgos.
Lo rodean Las Viadas, el límite con la provincia de Álava por Valdegobía, Rufrancos, Extramiana y Santa Coloma.
Su nombre aparece escrito por primera vez en el censo-pesquisa que el rey Pedro I manda hacer en toda Castilla en 1352, que más tarde dio lugar al llamado “Libro de las Behetrías” e, incluso, aparece como despoblado en aquella época.
Cuatrocientos años más tarde, en 1752, sus pobladores, en las respuestas generales del Catastro del Marqués de la Ensenada, declararon su pertenencia al señorío del duque de la ciudad de Frías.
Según consta en el Diccionario geográfico de Pascual Madoz, habitaban el lugar 71 personas en el año 1848. En línea con la inmensa mayoría de los
pueblos de la provincia, creció a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX y contaba en 1900 con 139 habitantes. Descendió, sin embargo, en la dura primera mitad del siglo XX y presentaba en 1950 un censo de 78 personas. Y como consecuencia de la persistente emigración de la segunda mitad del siglo,
ha quedado reducida a 18 habitantes en el año 2000