El tercer fin de semana de octubre se realizan los actos de recibimiento del emperador en las
calles del casco histórico con un
mercado renacentista. El domingo por la mañana se hace un desfile imperial, donde se recibe al emperador y su séquito proveniente de
Cantabria en la avenida de Bilbao donde se les recibe por el señor de Medina el Condestable y las autoridades de la entonces Villa, a continuación todos desfilan hasta la
plaza del
Corral, donde el acto finaliza con un discurso del emperador y las autoridades.