Sus habitantes viven su fe en una
iglesia, dedicada a
San Juan Bautista, renacentista, de una nave y cabecera más estrecha con nervaturas y claves
de
piedra. Su
ábside es rectangular,
románico, con
arcos ciegos y
ventanal tapiado. Tenía una
portada barroca, con pilastrones,
arco de medio punto y bolas, ahora cegada. La actual es moderna con arco de medio punto y grandes dovelas.
Y la
torre es en
espadaña, barroca, rematada en bolas, con óculo, tres huecos y dos
campanas y un campanillo.
La
pila es
gótica, con gallones y pie hexagonal en cono; y el
retablo mayor es rococó. En otro, barroco, hay una
Virgen sedente con Niño, gótica. Hay también un Crucificado
gótico de pared. Y
púlpito de piedra con relieves.
Sus libros parroquiales comienzan en el año 1658.
Tiene una
ermita dedicada a la Virgen de la Caraba, con retablo barroco e imagen de la Virgen sedente con Niño, gótica.
A comienzos del siglo XX nace el padre Lorenzo Infante, agustino, escritor.
En febrero de 1940 comienza sus días Ramiro Camarero Camarero, que, con Domingo Ortega Gutiérrez, escribe sobre su
pueblo; y otro libro en solitario,
suplementario.
Posee una extensa y poblada dehesa de haya y roble.
En sus tierras está denunciada una importante
mina de cobre.
Y están catalogados un yacimiento arqueológico posiblemente del Neolítico o Calcolítico y tres
Medievales.