por Yolanda Carranza Berezo
La
iglesia abacial de
San Salvador es el principal reclamo
monumental con el que cuenta la Villa, pero no el único ni mucho menos. En la
plaza del
Ayuntamiento se localiza la Iglesia de San Juan Bautista, levantada entre los siglos XII al XVI. Su interior destaca por el excelente estado de conservación con importantes restos románicos, un
calvario gótico del XIII, su
portada gótica y un
retablo barroco sin dorar. Junto a esta iglesia se alza la
torre de San Juan, que alberga el “
Museo de la Resina”. En la última planta se dispone un
mirador desde el que se observa una fantástica panorámica de toda la Villa. Aparte del contenido la propia torre destaca por la restauración realizada, ya que en todo momento se han respetado los elementos originarios y propios de la construcción.
Entre el patrimonio
artístico con el que cuenta
Oña no solo se encuentra el religioso sino también el civil. Son varias las
casas blasonadas y recién restauradas por sus titulares que nos muestran este no menos interesante patrimonio artístico y cultural. El turista que se acerca a Oña no tendrá que buscar mucho para encontrarse con numerosos
escudos de armas y
blasones en las
fachadas; o también rincoles y elementos como los
lavaderos y
abrevaderos reconstruidos para preservarlos y trasmitirlos a generaciones futuras. Pasear por la
Calle Barruso en antiguo
barrio de la
Judería, y encontrarse con sus antiguas casas será otro momento inolvidable para el visitante.