Toda la población, excepto la
plaza Mayor, está en cuesta, y las edificaciones se adaptan perfectamente al terreno. La
arquitectura es la típica norteña, en algunas con
soportales y muros de entramado de madera. En el centro del
caserío encontramos la plaza Mayor, gran espacio abierto, partida por la mitad por el cauce del manantial que cae de la
Cueva del
Agua, situada en lo alto de la villa y que se puede ver desde la misma plaza. Este cauce, que surte de agua potable a la localidad, divide a la misma en dos partes, la Villa, en su margen derecha y, la Puebla, en su margen izquierda.