La
fuente del Abad, abastece al
pueblo de
agua potable, hasta hace unos años el mencionado manantial, sustentaba el pequeño arroyo que atravesaba el pueblo, pero en la actualidad dicho sobrante es utilizado para dar agua potable a la urbanización del
Mirador de
Cerezo de Mena. A la izquierda una
casa del siglo XVII con
ventanas ojivales y que en la actualidad se utiliza como
pajar.
En la parte menos agraciada del
valle de Mena, en las estribaciones de los
montes de la Peña y en terreno desigual se encuentra situado
OVILLA, a 41
Km de Villarcayo y 116 de
Burgos, al que se llega por una
carretera interior, que parte, cerca de
Villasana de Mena, de la que une esta localidad con Arciniega, ya en
Álava.
Le prestan límites y compañía Anzo, el despoblado de
Cilieza,
Medianas y
Covides.
Encontramos su nombre escrito por primera vez el 28 junio de 1263 en la documentación del
monasterio de
San Salvador de Oña. No aparece, sin embargo,
en el Catastro del Marqués de la Ensenada, por lo que desconocemos su calidad de realengo o señorío.
Su población ascendía en 1848 a 76 habitantes, según consta en el Diccionario geográfico de Pascual Madoz, que nos lo ofrece escrito con “be”. A
diferencia de la inmensa mayoría de los
pueblos de la provincia, mantenía esa misma población en el año 1900. Desconozco su evolución a lo largo del siglo XX, pero figura el año 2000 con 17 habitantes, incluidos los pocos que quedan en Cilieza, que tiene como anejo, ya sin
iglesia.