Padilla de Abajo es una pequeña villa burgalesa y un municipio al oeste de la provincia, que se encuentra en una llanura fluvial entre los
ríos Odra y Pisuerga, de ahí el nombre de la comarca, los páramos de Castrojeriz y las estribaciones de Peña Amaya.
Aunque en su término se han hallado restos de edificaciones
romanas, sus orígenes en la
historia surgen como en la mayoría de las merindades burgalesas, a partir de la repoblación que tuvo lugar en el siglo X.
Se denominaba “Padiella de Yuso” y es cuna de la
familia Padilla. A este importante linaje
medieval perteneció la reina María de Padilla, esposa de don Pedro I el Justiciero.
Su cercanía a ambos ríos y sus extensos
campos, hacen que su economia fundamental gire en torno a la
agricultura intensiva, siendo el cereal el elemento estrella de sus cultivos.
Cuenta con un rico patrimonio histórico destacando la
iglesia de los
Santos Juanes y la
ermita de Nuestra Señora del
Torreón con su
ábside de
columnas entregas.
Su iglesia dedicada a
San Juan Bautista y San Juan Evangelista es de estilo
gótico, data del siglo XII, aunque su
portada es renacentista, la
torre es posterior, del siglo XIX. En su interior el
retablo mayor es barroco del siglo XVII.
Existen dos cruceros, uno situado en la salida del
pueblo y otro junto a la ermita mirando hacia Padilla de Abajo. En el atrio de la iglesia hay dos miliarios
romanos, del siglo primero a. C., que pertenecían a la calzada “
Vía Aquitana”.
Padilla situada en un paraje natural, destacando sus
paisajes de llanura castellana, inolvidable para el turista que visita esta zona.