La talla del
Cristo Crucificado del
monasterio de
San Salvador es una imagen
románica, de finales del siglo XII. El Cristo clavado en la
Cruz es una talla de madera policromada que preside la
iglesia del
convento burgalés. Tiene unas dimensiones de 2,76 metros de altura, 2,23 metros de ancho y entorno a 40 centímetros de fondo. La pieza mantiene el modelo de Cristo
Románico, con los pies clavados por separado, como en el
arte bizantino. El Cristo, no presenta lanzada en el costado, mantiene los ojos abierto y no muestra signos de sufrimiento, como evidencia de su
naturaleza divina.