Tiene su
iglesia dedicada al Arcángel
San Miguel. Es de una nave de dos cuerpos y una
capilla con contrafuertes. El primer cuerpo lo forman la cabecera,
románica rectangular y el segundo, recrecido tiene
bóvedas nervadas. El
ábside es rectangular
románico, con aspillera cegada y canes
historiados en
alero, toscos, con motivos religiosos, vegetales y animales.
La
portada tiene
arco de medio punto con impostas molduradas y dovelas también molduradas en los bordes, bajo
pórtico cerrado, con gran arco de medio
punto. En él hay un
ventanal estrecho cegado con columnillas sogueadas. Recientemente se ha descubierto en el lienzo de pared que media entre la sacristía y el pórtico una interesante portada románica. Y la
torre es cuadrada, a los pies, sólida y bien construida, con dos cuerpos (el segundo de 1886) con cuatro huecos y dos
campanas.
La
pila de bautismo es románica, con dibujos geométricos, claramente rehechos. Y el
retablo mayor es neoclásico.
Sus libros parroquiales dan comienzo en el año 1688.
Hay una torre cuadrada, con vanos muy variados, góticos y renacentistas, de principios del siglo XVI. Perteneció a los Quintana.
Hay en sus tierras una cantera de
piedras de
molino.
Y en esta
parroquia vivió sus primeros cinco años de sacerdocio el autor de este libro.