En lo más alto de la villa de
Pineda de la Sierra, en concreto en su
barrio de Ondevilla, se alza la
iglesia parroquial de
San Esteban Protomártir. Es un templo básicamente de factura
románica en el que sobresale su galería porticada. Construido, entre finales del siglo XII y principios del siguiente, este elemento arquitectónico servía y sirve para proteger a los fieles de los duros
inviernos serranos.
La galería porticada protege el costado meridional de la iglesia y cobija en su interior la
portada de esta. El
pórtico presenta once arcadas de medio punto repartidas en dos grupos separados por una resaltada
puerta de acceso. Los cinco
arcos de la derecha y los seis de la izquierda descansan sobre dobles
columnas que a su vez apean en un elevado pódium. Los
capiteles son gemelos y están decorados con estilizados motivos vegetales. Esta misma iconografía, en la que se rastrean influencias silenses, es la que decora los cuatro capiteles de la puerta de la galería.