Pues yo aunque no aprendí a nadar allí, también me bañaba en éstas salinas hace unos 30 años, ¡como se flotaba!!. Recuerdo que a parte de la especie de
piscina en la que nos bañábamos, había un pequeño
pozo cuadrado, en el que nos metíamos y tenía tanta sal que se flotaba sin apenas moverte. Pasé dos
veranos en ese
pueblo de pequeña y tengo muy buenos recuerdos.