PUENTES DE AMAYA
Puentes de Amaya es un despoblado apenas visible entre la maleza, que se localiza al final de un
valle que sigue de norte a sur el curso del pequeño
río Fresno, al pie de un imponente cinturón rocoso que forman las peñas Amaya y
Albacastro, situado en la provincia de
Burgos, en la comarca de Odra-Pisuerga.
Se le cita hacia 1250 en la relación de
pueblos que contribuían a la mitra burgalesa.
En 1970 todavía contaba con ocho
casas destinadas a vivienda y estaba habitado por tres
familias. Tres años más tarde era ya un despoblado. Hoy sin ninguna
casa en pie, este
pueblo es un montón de
ruinas apenas perceptible por la salvaje vegetación que todo lo envuelve.
Su
iglesia en ruinas e invadida de vegetación, estaba dedicada a la Purificación de Nuestra Señora. Tenía una sola nave, con restos románicos y renacentistas, con varios óculos en su estructura y un interesante
arco de medio punto con fustes y
capiteles de entrada al presbiterio.
La no disposición de una
carretera mínimamente aceptable y la falta de luz eléctrica, fueron las principales causas de su muerte. Aunque hubo también otras causa, como por ejemplo la invasión de culebras que sufrió el pueblo en sus últimos años, entraban ya en las casas y picaban a las
vacas.
El tiempo, la vegetación, el abandono y los saqueadores han dado con este pueblo en el desamparo, la
ruina y el recuerdo.