En el
valle de Valdelaguna, en una
carretera que, partiendo del
Barbadillo del Pez, se adentra en la
Sierra, buscando a Neila, cercano al curso del
río Tejero, afluente del Pedroso, en terreno ligeramente desigual, se encuentra situado
QUINTANILLA DE URRILLA, a 17 km de
Salas de los Infantes y 73
de
Burgos.
Le prestan límites y compañía
Vallejimeno,
Barbadillo de Herreros,
Riocavado de la Sierra, Barbadillo del Pez y los
montes de la sierra de Neila por
el sur.
En la documentación del
monasterio de
San Pedro de Arlanza aparece su nombre escrito por primera vez el 30 marzo de 1144, como “Quintanella”. Y
el padre Enrique Flórez lo cita hacia 1250, como “Quintanilla Xemena”, entre los
pueblos que contribuían a la mitra burgalesa. El Marqués de la
Ensenada recoge en las respuestas generales de su célebre Catastro las declaraciones de sus pobladores en 1752, que afirmaron pertenecer únicamente al rey, es decir, era lugar de realengo.
Pascual Madoz le asigna 80 habitantes en el año 1848 en su Diccionario geográfico. Como la inmensa mayoría de los pueblos de la provincia, creció a
lo largo de la segunda mitad del siglo XIX hasta contar en 1900 con 148 personas. Mantuvo el mismo buen nivel en la dura primera mitad del siglo XX y presentaba en 1950 un censo de 145 habitantes. La triste realidad de la emigración de la segunda mitad del siglo lo ha dejado reducido a 12 personas
en el año 2000.