A la entrada del
pueblo, según se viene de
Tardajos y frente al
edificio escuela levantado por Don Baldemero Pampliega entre los años 1882-1884 se yergue el
Palacio, que fue del conde de Villariezo en el siglo XVII. Don Ramón Pardo dice que debió ser construido en los primeros años del siglo XVII.
La
Torre - Palaciega es uno de los
edificios más emblemáticos de
Rabé de las Calzadas. Por una escritura de venta del 1 de julio de 1656 se conoce que su primera propietaria era la Condesa de Montalvo. A su muerte el palacio fue vendido a D. Diego de Riaño, 1º Conde de Villariezo. Este Palacio estuvo en posesión de esta
familia hasta que el 4º Conde de Villariezo D. Ángel de Riaño y Gamboa tuvo por hijo a D. Antonio y de este lo heredaron sus hermanas, que no tuvieron sucesión.
Por esta razón se hizo cargo del edificio el Marqués de Castromonte a fecha del s. XVIII. Destacan en él su sobriedad de líneas, predominando lo arquitectónico sobre lo escultórico. El Palacio es grande, con
fachadas de
piedra de sillería procedentes de Hontoria de la Cantera. La
puerta principal está franqueada por dos
torreones y en su dintel se sitúa el
escudo del conde de Villariezo.
Entre los dos torreones queda un amplio
patio ajardinado. Actualmente está dividido en distintas propiedades, que pertenecen a diversos dueños. Están rehabilitadas el ala derecha y central, quedando sin reparar el
torreón izquierdo que es la parte que está en venta.
Dicho torreón tiene una superficie de unos 250 m2 de planta. La planta baja dispone en su mitad anterior de una arcada renacentista, en bastante buen estado de conservación. La primera planta tiene así mismo 250 m2 de superficie reduciéndose estas medidas a la mitad en la tercera planta, dándole así el aspecto de Torre. En su interior quedan restos de pinturas decorativas en las paredes y artesonado en el techo, así como detalles arquitectónicos y el suelo original de la época, que dan idea del lujo que en su momento debió respirarse en este edificio.