REDECILLA DEL CAMINO: Efectivamente a mediados de los años 50, cayó un rayo...

La fotografía es de finales de los 60 - comienzos de los 70. Los maestros vivieron en la plaza hasta finales de los 60, y cuando estrenaron la nueva casa, los niños de mi generación colaboramos instalando los tepes de cesped que venían de la vega, en los alrededores de la casa; a cambio del trabajo realizado nos regalaron libros. La mayoría de los danzantes de la fotorafía colaboraron -Resti, Julián, Nacho, Isaías, Jose Mari, Clemente..... que buena pandilla!

Hoy ese camino a San Roque está urbanizado con unas 12 casas recien hechas en 2009.
Redecilla del Camino se mueve...

Me he dado cuenta por tus comentarios de la nueva urbanización -es la de Reláchigo?.
En algunos videos que vi antes de entrar en ésta página pude observar todos los cambios, que me desubicaron un poco, pero que espero sean para bien. Lo que ocurre es que cuando empiezas a rebobinar el disco duro y ves las obras modernas, que cambian el paisaje que tu memorizaste, sientes nostalgia por tiempos pasados, pero bueno, el progreso es el progreso.

Por cierto, en el camino de Ayago, subiendo, aproximadamente a unos 1.000 mts. pasado el cementerio y a mano dcha., había un árbol (puede ser un Olmo, como el de la poesía de Antonio Machado) partido (hendido) por un rayo, donde Gerardo Calvo contaba que siendo joven se guareció en una tormenta, y el rayo lo recibió junto con otras 2 personas -no me acuerdo de los nombres- y alguna bestia. Quedaron desmayados unos minutos y creo que todos se recuperaron. En la subida creo que los danzantes hacían allí una parada,... Hay alguna foto por el foro del lugar? No se si estoy mezclando los recuerdos, pero continúo recordando cosas a medida que veo otras....

Efectivamente a mediados de los años 50, cayó un rayo en el viejo olmo, hoy desaparecido, y que intentamos plantar con otros renuevos.
En ese rayo murieron los dos más jovenes del grupo: Jose Mª ya bachiller e hijo de Vicente y la Amada, y Fernando Puras hijo de Agapito electricista...
Fue una grave imprudencia meterse debajo de un árbol tan copudo, en medio de una gran tormenta. Una de las mayores tragedias que se recuerdan en el pueblo