SEUL.- En un desafío directo a los líderes de Corea del Norte, el presidente Barack Obama les imploró el lunes que "tengan el valor de perseguir la paz" al tiempo que advirtió de la ira del mundo si actúan al contrario.
No buscar la paz, dijo Obama, podría implicar un futuro sin dignidad, respeto ni esperanza para el pueblo norcoreano.
Obama reiteró su compromiso de un mundo libre de armas nucleares y en una aseveración tajante señaló que Estados Unidos tiene un arsenal suficiente, al que podría reducir sin debilitar la seguridad del país ni la de sus aliados.
Tal declaración contrapone a Obama con los legisladores republicanos que aseguran que cualquier reducción importante del arsenal podría socavar la capacidad de Estados Unidos para disuadir una agresión en su contra.
Mientras Obama hablaba de la paz en el paréntesis de una cumbre nuclear internacional, las tensiones se intensificaron en la península coreana.
Seúl advirtió que podría derribar un cohete norcoreano portador de un satélite si la nave viola espacio aéreo surcoreano. Estados Unidos sostiene que el lanzamiento se inscribe en el plan norcoreano de disparos de pruebas de misiles de gran alcance.
En palabras con un tono personal que contrasta con lo habitual, Obama habló de su deseo de ulteriores reducciones nucleares como el presidente de la única nación que ha utilizado armas atómicas, como el comandante de un país que tiene siempre cerca los códigos nucleares y como un padre protector deseoso de erradicar la amenaza de la aniquilación nuclear.
Obama también se reunió al margen de la cumbre con el mandatario saliente ruso Dimitry Medvedev. Después tenía previsto entrevistarse con el presidente chino Hu Jintao, a quien tenía previsto apremiar para que ayude en el tema de Corea del Norte
No buscar la paz, dijo Obama, podría implicar un futuro sin dignidad, respeto ni esperanza para el pueblo norcoreano.
Obama reiteró su compromiso de un mundo libre de armas nucleares y en una aseveración tajante señaló que Estados Unidos tiene un arsenal suficiente, al que podría reducir sin debilitar la seguridad del país ni la de sus aliados.
Tal declaración contrapone a Obama con los legisladores republicanos que aseguran que cualquier reducción importante del arsenal podría socavar la capacidad de Estados Unidos para disuadir una agresión en su contra.
Mientras Obama hablaba de la paz en el paréntesis de una cumbre nuclear internacional, las tensiones se intensificaron en la península coreana.
Seúl advirtió que podría derribar un cohete norcoreano portador de un satélite si la nave viola espacio aéreo surcoreano. Estados Unidos sostiene que el lanzamiento se inscribe en el plan norcoreano de disparos de pruebas de misiles de gran alcance.
En palabras con un tono personal que contrasta con lo habitual, Obama habló de su deseo de ulteriores reducciones nucleares como el presidente de la única nación que ha utilizado armas atómicas, como el comandante de un país que tiene siempre cerca los códigos nucleares y como un padre protector deseoso de erradicar la amenaza de la aniquilación nuclear.
Obama también se reunió al margen de la cumbre con el mandatario saliente ruso Dimitry Medvedev. Después tenía previsto entrevistarse con el presidente chino Hu Jintao, a quien tenía previsto apremiar para que ayude en el tema de Corea del Norte