Veo que la gente tiene inquietudes por la casa rural y me parece muy bien, pués es un bien general para el pueblo y como no, para los peregrinos. Soy un enamorado de Redecilla y puedo decir que el Albergue es de lo mejorcito del camino, por las instalaciones, por los servicios y por las mujeres que lo atienden, quen son maravillosas, atentas, reservadas, amables y especialmente Mari Carmen. Seguid así que al final os llegará la recompensa con el agradecimiento de los peregrinos y del boca a boca diario que se transmite entre los que hacemos el camino. Un fuerte abrazo.