Perfecto PEDRO MIGUEL, ahí estaba sí señor e innumerables veces nos asocallabamos de la lluvia y el frio viento en su interior. Mientras, las yeguas seguian pastando en la pradera juncosa de enfrente.
¡Años durísimos para todos pero especialmente para los más desfavorecidos!.
Un afectuoso saludo en éste tú publo PEDRO MIGUEL, y a todos/as.