El escaramujo es comestible en crudo, resultando en fresco una excelente fuente de Vitamina C tras quitar las semillas pilosas del endocarpio, y es apto para la confección de mermeladas, confituras y jaleas. También es un ingrediente corriente en tisanas, muchas veces mezclado con hibisco. En Suecia se hace sopa de esta fruta del bosque.
Del escaramujo también se puede extraer un aceite apreciado en perfumería.