De niños, por Santa Isabel, nos íbamos caminando desde San Mamés hasta la Virgen de la Vega, junto con los familiares màs próximos...y de muy pequeños...esperábamos en Arruela, junto al riachuelo, a que llegaran los familiares con las sabrosas cerezas, siempre presentes en esta festividad...durante la espera...y al lado del riachuelo consegíamos plantitas de anís que consumíamos en el momento.(PMB).