SAN QUIRCE: De tu corazón nací y por eso así te siento, tu sangre...

De tu corazón nací y por eso así te siento, tu sangre corre en mis venas.
Y a ti quisiera volver cuando se acaben mis días, reposando en tu calor,
Pero no en tu Camposanto, de forma tradicional, sino esparcido en tus tierras.
Yo deseo que mis restos convertidos en cenizas, desde lo alto del Santo,
Sean lanzados al viento, y que caigan en tus tierras, y que se mezclen con ella
Mientras tocan tus campanas, las campanas de "mi iglesia" con señal de acogida.
¡CAMPANAS DE MI LUGAR QUE ME QUISISTEIS DE VERAS; TAñISTEIS CUANDO NACí, HACEDLO IGUAL CUANDO MUERA!

PR.