Su
iglesia está dedicada a
San Pedro, Apóstol, y es
gótica, de tres naves y
capilla lateral con
columnas,
capiteles,
arcos y nervios de crucería en
piedra y restos románicos. Su
ábside es rectangular. La
portada es gótica, buena, de
arco rebajado con tímpano liso, ménsulas decoradas, con arquivoltas y cornisa con variedad de calados, grumos y gabletes. Tiene otra portada bajo un gran arco de medio punto, también gótica adintelada con tímpano decorado, arquivoltas y guardapolvo, y se ve que ha tenido otra igual. Y la torrees cuadrada, amplia y almenada, con ocho huecos y tres
campanas. Y una pequeña
espadaña con
hornacina y un campanillo.
La
pila es gótica, de copa lisa, pie cilíndrico moldurado y base circular; y el
retablo mayor, bueno, es renacentista, de Juan Ricardo y Cornielles de Amberes, de 1540 con imágenes y relieves. Hay una
Virgen sedente gótica del siglo XIV.
Un escaño con decoración gótica. Sillería coral sin muchos relieves. Y una piedra con leyenda. Un buen conjunto de iglesia.
Sus libros parroquiales comienzan en el año 1529 y hay uno de testamentos de 1441.
Destaca a las afueras la
ermita románica de Nuestra Señora de
las Eras, de una nave con cabecera semicircular, con columnas, capiteles y arcos de piedra y
bóvedas de cañón, apuntadas y decoradas. Su ábside es
románico con contrafuertes y tres
ventanales con capiteles, ajedrezado y decoración floral. La portada es también románica con arco bilobulado, dos arquivoltas lisas y remate floreado de hojas y otra más pequeña con una arquivolta y remate floreado de rosetas. La
torre es una espadaña rematada en
cruz con dos huecos vacíos. En ella hay también un
ventanal románico.
Conserva dos
puertas de la antigua
muralla y, sobre el cerro, las
ruinas de un
castillo fortaleza, construido por don Tello, hermano de Pedro I, del siglo XIV con dos cubos de muralla y torre del
homenaje en el centro.
Tuvo un
monasterio de franciscanos Recoletos, dedicado a San Bartolomé, hoy desaparecido y el existente de Nuestra Señora del Espino de benedictinos, hoy redentoristas.
Tiene otra ermita dedicada a Nuestra Señora del Patrocinio.
Hay restos de una calzada
medieval. Y
casas blasonadas.
Tuvo tres cruceros de los que tan sólo se conserva uno casi completo al norte y la
columna de otro. El tercero ha desaparecido.
En 1522 nace el padre Andrés Ortiz de Oruño, jesuita, misionero en
Perú, escritor.
En sus tierras están catalogados un yacimiento arqueológico Tardorromano con posibles restos del Calcolítico y uno Medieval. Y, además, uno posiblemente del Calcolítico con restos
Medievales, uno posiblemente de la Edad de Hierro y
uno posiblemente Tardorromano o Visigótico.
En la actualidad destacan en la pintura Claudio Palma Arín y los pirograbados de José María Mardones Arín.