Con el encanto de las iglesias situadas en medio de la naturaleza. Sólo rodeada de monte y campos de labor. Ermita de San Salvador. Edificada en el siglo XII, consta de una sola nave acabada en un ábside semicircular. Su muro es de sillería y en su portada se integran arquivoltas sujetas por columnas y pilares con representaciones escultóricas diversas en sus capiteles. Debajo del tejado del ábside hay una serie de arquillos ciegos que descansan sobre pequeñas columnas. También en el ábside aparece una ventana en la cual está la escultura de una sirena de dos colas y exuberante cabellera.