Tiene una magnífica
iglesia,
románica, dedicada a
Santa María, (aunque la
parroquia es de
San Esteban). Es de finales del siglo XII, aunque ha sufrido múltiples reformas. Es de una nave con
capillas, toda ella de
piedra sillar, pilastrones y canes en
alero y abundante decoración. La
bóveda del
ábside es de cañón, pero lo demás marca ya signo de crucería
gótica. Su ábside es semicircular, con impostas corridas,
columnas hasta el alero,
ventanales y canes decorados. En el interior tiene una bellísima arquería doble con siete
arcos y a ambos lados se abren unos edículos con bóveda propia y abundante decoración. Tiene una
portada a los pies (la principal, aunque no se usa) de
arco de medio punto con columnas y
capiteles y cinco arquivoltas lisas y canes en tejaroz; y otra ya ligeramente apuntada con arco decorado, cuatro columnas con capiteles y doble arquivolta lisa con guardapolvos. La
torre, a la mitad del
edificio, posterior, es cuadrada, sencilla, con alero moldurado, cuatro huecos y dos
campanas.
Al parecer formó parte de un antiguo
monasterio-abadía secular.
Recién restaurada por la Fundación del Patrimonio de
Castilla y León