Después de ver la ermita de Santa Ana hay que bajar por el camino de la Vega, bordeado de chopos en casi todo su tramo, y refrescarse en la fuente de la Charca. Desde allí hay que dirigirse a la derecha para tomar el camino que desemboca en el camino de Los Abades, ir hacia la derecha hasta el cruce del camino de San Isidro y subir a ver la ermita...