A las afueras del
pueblo, un poco apartada, está la
iglesia, dedicada a
San Andrés, Apóstol; es
románica en cabecera con
arco toral de
columnas y
capiteles historiados, buenos, y
bóveda de cañón; y el resto con
capillas en
cruz latina y
bóvedas de yeso. Su
ábside es
románico con contrafuertes, tres
ventanales con fustes, capiteles, ajedrezado y canes de taco. La
portada es románica, deteriorada, con dos arquivoltas y dos capiteles sin fuste. Y la
torre es cuadrada con
aleros moldurados, rematada en pináculos, con seis huecos y dos
campanas.
La
pila es de copa lisa y tiene el pie abalaustrado; y el
retablo mayor es barroco, en torno a 1750, con un San Andrés y un San Juan Bautista del siglo XVI y un hermoso Sagrario clasicista. En otro, clasicista, hay una buena
Virgen sedente con Niño del siglo XIV.
Tiene una buena portada renacentista de entrada a la sacristía.
Sus libros parroquiales comienzan en el año 1559.
Hay un
torreón de la segunda mitad del siglo XV de baja altura y en la actualidad un
tejado sustituye a las seguras almenas.
Y en sus tierras están catalogados dos yacimientos arqueológicos posiblemente del Calcolítico
Iglesia
Data de la segunda mitad del siglo XII.
Pertenece a la
escuela de Rebolledo de la Torre.
Conserva el ábside primitivo románico en
piedra de sillería, con bóveda de
horno y ventanales decorados a base de figuras algo toscas.
Destaca su arco triunfal esculpido a la manera de la Escuela de Rebolledo de la Torre, con grifos y basiliscos afrontados en sus capiteles.
La iglesia tiene adosado un
reloj de sol de 1776 (aquí fotografiado), con una
placa encima que parece ser del donante.