En la parte más occidental de la provincia –zona de
Melgar de Fernamental– en una
carretera interior que parte de la que va remontando el curso del
rio Pisuerga por su margen izquierdo y en terreno ligeramente desigual, encontramos a
TAGARROSA, a 18 km. de Villadiego y 52 de
Burgos.
Le acompañan formando corona a su alrededor
Santa María Ana Núñez;
Villamayor de Treviño,
Villahizán de Treviño, y
Villanueva de Odra en la lejanía,
Guadilla de Villamar,
Rezmondo y
Valtierra de Riopisuerga.
Aparece pronto escrito su nombre: el 11 marzo de 969 en el cartulario del
monasterio de
San Pedro de Cardeña: “a partes de Tagarroza” y en las respuestas generales del Catastro del Marqués de la Ensenada aparecen las declaraciones de sus pobladores en 1752 que dijeron pertenecer al señorío del duque de Frías.
Contaba con 39 habitantes en el año 1848, según atestigua Pascual Madoz en su Diccionario geográfico. En sintonía con la inmensa mayoría de los
pueblos de la provincia, creció a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX y presentaba en 1900 un censo de 144 personas. Descendió rápidamente en
la dura primera mitad del siglo XX hasta tener tan sólo 83 habitantes en el año 1950. Y termina el siglo con 24 personas en el año 2000, después de sufrir los embates de la pertinaz emigración.