HOMBRES Y TIERRAS DE TARDAJOS por SEVERIANO PAMPLIEGA NOGAL
-LA FIESTA DE LOS MACABEOS-
A todo esto comenzaron a caer los primeros granizos, (aunque no eran tan gordos como los "juramentos" de la turbamulta que retumbaban más que los truenos). Entonces al Caracol se le ocurrió una idea. Ellos mismos abrirían el Sagrario del altar de las Reliquias, porque el Sacristán sí que estaba y tenía las llaves de la iglesia. Entraron, pero nadie se atrevía a meter la mano en el Sagrario por miedo a que ... (ver texto completo)
-LA FIESTA DE LOS MACABEOS-
A todo esto comenzaron a caer los primeros granizos, (aunque no eran tan gordos como los "juramentos" de la turbamulta que retumbaban más que los truenos). Entonces al Caracol se le ocurrió una idea. Ellos mismos abrirían el Sagrario del altar de las Reliquias, porque el Sacristán sí que estaba y tenía las llaves de la iglesia. Entraron, pero nadie se atrevía a meter la mano en el Sagrario por miedo a que ... (ver texto completo)
¿Qué puedo decir ante este recuerdo? Sólo esto, que ni la fe ni la confianza admite grados. Se cree o no se cree. Se confía o no se confía. La fe es un dogma cristiano y quien cree tiene fe y confianza. La confianza es humana, y una vez que es defraudada por los propios humanos, se pierde irremisiblemente.
Con respecto a esta fiesta, el año pasado el señor alcalde decía a los compañeros de sus batallas, los que le quedan, que esta fiesta la iba a hacer fiesta local pero no ha sido así. A una siempre ... (ver texto completo)
Con respecto a esta fiesta, el año pasado el señor alcalde decía a los compañeros de sus batallas, los que le quedan, que esta fiesta la iba a hacer fiesta local pero no ha sido así. A una siempre ... (ver texto completo)