A mi luna no me da mal augurio, como a muchos poetas. La siento cercana. Hoy no ha sido día de gracia para las patirrojas, tengo tres que pelar. Así que os dejo. Me dicen, déjalas para mañana, y yo no quiero si algo tengo que hacer, y encima, molesto, lo hago cuanto antes. No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy, y así mañana podré sentarme tranquilamente a escribir a saber de qué. Muchas ideas van y vienen, mas procuraré centrarme en lo de siempre para no variar, que creo que ahora no me acuerdo pero mañana seguro que vuelvo al tajo que dejé aparcado. ... (ver texto completo)