Por fin han vuelto los caballos de sus majestades los Magos del lejano Oriente a pasear, tranquilamente, por las calles de Tardajos. Ya están las fotos servidas, que es verdad que aproveché la claridad todo cuanto pude, que no me quería enfriar mucho que ya me he acatarrado un pelín, y mañana hay que cantar. Se sabe cuando hay que callejear y cuando irse a buen recaudo a tomarse un descafeinado calentito. Una misma sabe bien cuidarse.
Pero es verdad que el año pasado estaba mucho más acatarrada ... (ver texto completo)
Pero es verdad que el año pasado estaba mucho más acatarrada ... (ver texto completo)