Y qué santo y piadoso soy, y luego no digas nada que te crucificarán. Que una señora que esté encargada del colegio le pase la patata cuando quema a los otros dos. Harto hacen, uno recibiendo las culpas que no tiene, otro partiendo el poco bacalao que aquí se parte. Me indigna que haya señoritos y señoritas y esclavos.