Da para reflexionar que lo que hubo en aquel punto, el quinto, fue mucho desvarío, una porque abrevia y va al grano. Se quiso culpar de la sentencia al presidente del coto. Yo presumo que porque no se leyeron la sentencia en cuestión.
Dos abogados, uno aporta hechos concretos y argumentos basados en anteriores sentencias que al final hacen jurisprudencia. El de la parte denunciada argumenta lo mismo que el señor alcalde le dijo, lo mismo que manifestó en varios plenos anteriores, que la razón le asistía porque no estaba el tema de la báscula en acuerdos plenarios. Se lo creyeron, y con esa base fueron a defenderse. El no saber algo no te exime de pagar lo que sea. Como asesor fiscal lo hubiera tenido que saber.
Aquí lo que se debió de hacer en el pasado fue haber exigido toda la documentación completa desde el ayuntamiento y por la persona que lo debía hacer. Cuanto más papeles se hubieran exigido menos líos hubieran tenido en este relevo de gobierno. Lo bien hecho bien parece siempre.
Uno toma la vara de mando y eso dice que va a ser responsable de lo que se haya hecho bien y de lo que no. La vara es el todo. ¿Que uno solo quiere lo bueno y lo malo, no? Eso no se puede tener en la vida, menos en una alcaldía. Otra cosa es que uno pensara que mandar iba a ser coser y cantar, de ahí lo equivocado que estaba. Pudo, si hubiera querido saber lo que se cocía dentro, que hartas pistas había. No se quiso saber nada, pues a base de fallos se aprenderá como todo hijo de vecino o de vecina. Pero luego que no se venga a querer culpar a un colectivo de eso y de mucho más. Cada cual estaba obligado a lo que el contrato decía. Y firmado por alcalde anterior y concejales. Que si entonces no sabían nada ahora están obligados a saber, y si no, a aprender. Pagando se aprende de lo lindo, y encima se puede exigir. Con el documento en la mano, a pesar de estar ya abreviado, todavía lo he resumido más. No es lo mismo creer tener razón a que te la den. Y pagando luego se podrá exigir lo que en ley también corresponda.
Eso pasa siempre.
Lo más importante de todo era llegar a ser alcalde, ahora "que lo baile, que lo baile. Y si no lo baila medio cuartillo pague."
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