O no llueve o desborda el agua saliendo del cauce...
Aquí estamos aguas abajo y por tanto el Urbel recibe caudal. Es el tiempo, era hora que lloviera, pero no tanto. Y no elegimos, viene el agua que cae del cielo, en forma de lluvia o de nieve.
Página de enlace indicando la situación del Urbel y de otros ríos. El pantano del Arlanzón también ha abierto sus compuertas, luego si sigue lloviendo, veremos los prados inundados. Lo que pasa en la cabecera se resiente en el resto de la cuenca. El Úrbel a punto de saltar por encima del puente, por donde pasa el Camino de Santiago.