La
iglesia se levanta sobre un alto, en lo que era la parte más antigua del
pueblo. Sus gruesos muros y contrafuertes dan aspecto de fortalezas, aunque sus masas de
piedra ofrecen un conjunto equilibrado entre los tres cuerpos de la iglesia. Se cree que la
torre fue aprovechada para su construcción procedente del desaparecido
Castillo de
Tardajos.
Su estilo es puramente
Gótico del Siglo XIII, pero a lo largo de los siglos XVI y XVII se siguió edificando por lo que se observan elementos renacentistas. La entrada actual al
campanario y la
escalera de caracol, hasta la altura de la
bóveda de presbítero, son claramente de estilo
románico, siglo XII.
A finales del siglo XVI se comenzó a edificar el gran cuerpo rectangular de la iglesia y se levantó un cuerpo más en el campanario, la
fachada del mediodía, donde se encuentra la
puerta pequeña, tiene un
ventanal de medio punto y la misma puerta de
arco redondo denotan claramente estilo de renacimiento.
La colocación de la última piedra de las bobedas fue en 1676 como consta en uno de sus rodeles, siendo la altura de estas de 14 metros.
El
pórtico de la entrada principal es posterior, data de 1749, es de estilo protobarroco o herreriano, así en ella se encuentran elementos góticos, barrocos y renacentistas.
Ya en el interior destacan la Patrona del pueblo (religiosos por su
historia), «La
Virgen de las
Aguas», talla
Gótica policromada situada en
calle central justo encima del Sagrario, y la titular de la iglesia «La Asunción de Nuestra Señora», grupo escultórico situado en el segundo cuerpo también en la calle central. Es una pieza de gran belleza, muy cuidada y valorada por sus gentes que invitan al visitante a acercarse a contemplarla y admirarla.