Fueron unas fechas muy especiales, en que había que pasar al
cementerio con
flores para nuestros familiares y
amigos, y ellos, los plataneros también lo fueron. Nos cuidaban y nos daban todo el oxígeno necesario, y al final, el mejor pago, la muerte. Así somos de insensibles con la madre
naturaleza que tanto hace por nuestras vidas.