Magníficas fotos tengo de las inundaciones de esta primavera también. Similares, y llenas de encanto paisajístico. Hasta bandadas de cigüeñas y patos se regodeaban en estas aguas estivales. Y flores magníficas saldrán si no han salido ya. Levantaban el vuelo antes que tomara las instantáneas pero nos dejaban una sensación plena de belleza y dignidad. El agua es tan necesaria que no se cansa de reinventar paisajes idílicos aunque no conozcamos su valor. Mirando a través de una cortinita hecha de ramas, se hubieran podido ver aquí casitas flotantes, marchando a la deriva. Porque se sabe, que tipo de construcción se hacía, que se hizo en otros sitios donde si se podía edificar; y resultó, además de fiasco, ruina. Y gracias a una persona que hizo lo que tenía que hacer: los medios legales que conocía; hoy día, este problema no existe aquí. Sino un prado de aves y especies vegetales de todo tipo. Hoy día hay diversidad paisajista debido en gran manera...