CONTINÚA:
"CEMENTO PARA TAPAR LA HISTORIA EN TARDAJOS (BURGOS)" EN LA REVISTA INTERVIÚ DE 1992
Textos: Andrés Sánchez
fotos: Germán Gallego
"ITINERARIO" DE ANTONINO
Deobrígula aparece en los textos del "Itinerario de Antonino" que es una especie de tratado de las Calzadas del Imperio Romano. Y lo hace como una población de turmogos, pueblo que se asentaba en la ribera del río Arlanzón. En el proceso de romanización, los castros como el de Tardajos tienen una característica de traslación hacia los llanos de los valles, motivada por la "pax romana", que deja sin sentido los asentamientos en los altos con arquitecturas defensivas.
Un vecino de Tardajos, Alfredo Herrera, daba cuenta a mediados de los ochenta, en varios artículos del Diario de Burgos, de los frecuentes restos arqueológicos que se encuentran en la zona, tanto celtas (con el pequeño ídolo de un desproporcionado pene), como de edificaciones romanas y sus calzadas, que en el sistema de comunicaciones hacía del pueblo un importante enclave.
Es conocido por todos, en Tardajos, que el mismo convento de los Paúles ha servido de "depósito-museo" de muchas piezas, que finalmente han ido a reposar en el resto del patrimonio arqueológico recolectado en Burgos.
José Sacristán, arqueólogo territorial de la Junta en Burgos, nos lo confirmaba. Este experto opina que en Tardajos hay "un yacimiento de relevancia. La ciudad romana de Deobrígula es uno de los pocos casos que, junto con el de Clunia, Sasamón, Roa, Briviesca, y Osorno, se dan en la provincia de Burgos. Se pueden contar con los dedos de las manos".
"CEMENTO PARA TAPAR LA HISTORIA EN TARDAJOS (BURGOS)" EN LA REVISTA INTERVIÚ DE 1992
Textos: Andrés Sánchez
fotos: Germán Gallego
"ITINERARIO" DE ANTONINO
Deobrígula aparece en los textos del "Itinerario de Antonino" que es una especie de tratado de las Calzadas del Imperio Romano. Y lo hace como una población de turmogos, pueblo que se asentaba en la ribera del río Arlanzón. En el proceso de romanización, los castros como el de Tardajos tienen una característica de traslación hacia los llanos de los valles, motivada por la "pax romana", que deja sin sentido los asentamientos en los altos con arquitecturas defensivas.
Un vecino de Tardajos, Alfredo Herrera, daba cuenta a mediados de los ochenta, en varios artículos del Diario de Burgos, de los frecuentes restos arqueológicos que se encuentran en la zona, tanto celtas (con el pequeño ídolo de un desproporcionado pene), como de edificaciones romanas y sus calzadas, que en el sistema de comunicaciones hacía del pueblo un importante enclave.
Es conocido por todos, en Tardajos, que el mismo convento de los Paúles ha servido de "depósito-museo" de muchas piezas, que finalmente han ido a reposar en el resto del patrimonio arqueológico recolectado en Burgos.
José Sacristán, arqueólogo territorial de la Junta en Burgos, nos lo confirmaba. Este experto opina que en Tardajos hay "un yacimiento de relevancia. La ciudad romana de Deobrígula es uno de los pocos casos que, junto con el de Clunia, Sasamón, Roa, Briviesca, y Osorno, se dan en la provincia de Burgos. Se pueden contar con los dedos de las manos".