TARDAJOS: EL ALCOHOL...

EL ALCOHOL

Es una droga también pero si se toma en cantidades justas - no todo el mundo admite la misma cantidad que se estima como norma general- puede ser hasta beneficioso. Pero tener conciencia de cuánto puedes tomar, es muy difícil. Lo que si digo es que si te gusta beber no conduzcas pues en vez de hacerte daño solo a ti, puedes hacérselo a los demás.
La cabeza en la carretera hay que tenerla muy serena y si no la tienes, te paran, te hacen la prueba de la alcoholemia, pagas la multa y te quitan el carnet durante una temporada. Algunos, han aprendido de esta forma ya que las palabras no las quisieron admitir. Otros, van a ser reincidentes toda la vida, Y consecuentemente no podrán conducir.
Yo por eso soy partidaria de que los jóvenes se saquen pronto el carnet para que sepan valorar más y tomen más conciencia de lo que tienen entre manos. SI BEBES NO CONDUZCAS.

SI CONDUCES, VAS A TRATAR DE NO BEBER- es un eslogan que creo que podría funcionar mejor.

LAS DROGAS
Y el tema de las drogas, es todavía peor. Ataca la inteligencia al matar las neuronas, cosa que el tabaco hace y el alcohol también pero en menor medida- y cuando lo dejas se pueden regenerar. Es mucho más fácil dejar de fumar y de beber, que de consumir droga. Y como decía antes, si el cuerpo lo lleva mal, la sociedad que te metió en ello, es todavía peor.

La naturaleza no perdona, tiene memoria. Algo que parece banal se convierte en un verdadero infierno para el que lo vive y para los demás. Y parece que un día pudiste con ello, y a la mínima oportunidad se vuelve a instalar ese virus tan perjudicial de la droga.

¿De qué manera si la persona que lo dejó fue consciente de ello?

Pues cuando una persona enferma de una enfermedad degenerativa, y por lo que sea le vuelven a dar calmantes, éstos, una vez instalados en el cuerpo son reconocidos y puede empezar el ciclo de la dependencia. He leído que ocurre y lo he visto; menos mal que de lejos. Pero es cuando se puede estudiar ese fenómeno, cuando tienes la mente despejada y no te afecta. Lo bueno también es que luego se puede comunicar a los demás para concienciar. Si uno o una toma conciencia desde jóvenes de los muchos problemas que hay a nuestro alrededor, e intenta ayudar, es mucho más difícil que luego esos problemas le repercutan a ellos puesto que lo han visto en carne ajena, que se ve mejor.

Esto ocurre por una razón. ¿No habéis oido eso de que normalmente se ve la viga en el ojo ajeno y no la propia? Entonces, aprovechemos que somos capaces de ver los fallos y los defectos en los demás para algo que nos puede venir bien para no caer en ello. Porque una vez que tengamos el problema dentro, la solución es mucho más difícil. No vamos a ser capaces de verlo tan fácilmente, ya que pocos reconocen sus propios fallos.