No todo es alegría, que en su día perdieron los pinares, mis pinares de infancia. Y resulta con lo poco que les quedó, arreglaron todo el pavimento de las calles, al igual que en mi pueblo, que menudas calles y plazas han dejado. Se perdieron 11 vidas en aquel trágico suceso. A los familiares les han pagado mucho tras un juicio en el que tenían que culpar solo a los socialistas. Los pueblos afectados, que creían que les iban a ayudar a algo, tras la quema, en la que los campos han salido victoriosos pues se estaban recuperando ellos solos, a base de raíces, vuelven a ser de nuevo desahuciados por la esplendorosa técnica del fracking contra la que están luchando a brazo partido desde que lo supieron, y alertaron a otros pueblos en las mismas condiciones que no lo sabían.
O sea, que tras la quema, logran recuperarse momentáneamente hasta que surge algo peor, el fracking. Una maravilla destrozar la roca madre con las nefastas consecuencias que ello puede traer.
Además que trasvasan las aguas del Tajo al Segura, y les dejan secos. Además que son pueblos con deuda cero. No deben nada al estado, y abastecen de energía eólica a la red eléctrica, tanto Luzón como Maranchón. Sin embargo, no es suficiente. Que conste que estos pueblos tienen riqueza que si no no podrían autoabastecerse a si mismos y que quedase para los demás.
Lo del fracking es un conjunto de intereses de las eléctricas por las muchas deudas que tienen en Estados Unidos y Canadá, y nos han acogido como rehenes para que lo pague nuestro territorio nacional. Lo que se llama burbuja. Y lo mismo que afecta a esos pueblos, afectará a todos los pueblos de España. Menudo panorama.
O sea, que tras la quema, logran recuperarse momentáneamente hasta que surge algo peor, el fracking. Una maravilla destrozar la roca madre con las nefastas consecuencias que ello puede traer.
Además que trasvasan las aguas del Tajo al Segura, y les dejan secos. Además que son pueblos con deuda cero. No deben nada al estado, y abastecen de energía eólica a la red eléctrica, tanto Luzón como Maranchón. Sin embargo, no es suficiente. Que conste que estos pueblos tienen riqueza que si no no podrían autoabastecerse a si mismos y que quedase para los demás.
Lo del fracking es un conjunto de intereses de las eléctricas por las muchas deudas que tienen en Estados Unidos y Canadá, y nos han acogido como rehenes para que lo pague nuestro territorio nacional. Lo que se llama burbuja. Y lo mismo que afecta a esos pueblos, afectará a todos los pueblos de España. Menudo panorama.