LA FIESTA DE SAN ROQUE Y LAS UVAS EN ARES DE LA RÍA DE FERROL DE LA CORUÑA
La Iglesia Parroquial " San José" de Ares, de la Ría de Ferrol, festejó a San Roque, con la bendición de las Uvas, conmemorando una vieja tradición de sanación de las viñas aquejadas por el mal y que el Santo, según cuenta la leyenda, les devolvió la salud. La fe mueve montañas, como así lo recuerdan los aresanos, agradecidos por tanto bien como hizo San Roque con con esos exquisitos frutos, y quizás por eso guardan sus tradiciones celosamente, y lo ensalzan con gran fervor por las calles de Ares desde tiempos inmemoriales.
San Roque es llevado por sus parroquianos con un paso peculiar, con el orden y respeto debidos, y al son de la buena gaita gallega, que deleita en todo su recorrido al Santo, a sus fervorosos vecinos, danzantes del grupo local,"AREAS DO MAR" y amigos de la salerosa villa marinera durante todo el trayecto procesional. Es curioso pero la comitiva va por algunas calles pintadas, ya que el recorrido es el mismo donde se realizan las famosas alfombras florales de Ares en la fiesta del Corpus Christi, cada año. Por obra y gracia de los vecinos que colaboran en su preparación vistiendo y engalanando las calles de flores con mucho esmero para que luzcan de impresión en tal acontecer y asombren a los numerosos visitantes que recibe la villa cada año.
Durante la procesión de San Roque se forman tres filas que quieren ser perfectas con el público a cada lado, San Roque y sus portadores en el centro, seguido del grupo "Areas Do Mar" en buena sintonía con la gaita gallega. Al llegar a la playa, al Santo lo reciben con cohetes en signo de alegría y regocijo. Y una vez de vuelta a la iglesia de donde partió, el grupo de danzas baila en su honor ofreciendo un recital con un variado y cuidado repertorio, tanto infantil como juvenil.
Después de los vistosos bailes, tiene lugar el reparto de las uvas bendecidas durante la celebración eucarística para los asistentes a la fiesta.
Un año más la danza deleitó a su público y cosechó grandes aplausos por su buen hacer musical.
La Iglesia Parroquial " San José" de Ares, de la Ría de Ferrol, festejó a San Roque, con la bendición de las Uvas, conmemorando una vieja tradición de sanación de las viñas aquejadas por el mal y que el Santo, según cuenta la leyenda, les devolvió la salud. La fe mueve montañas, como así lo recuerdan los aresanos, agradecidos por tanto bien como hizo San Roque con con esos exquisitos frutos, y quizás por eso guardan sus tradiciones celosamente, y lo ensalzan con gran fervor por las calles de Ares desde tiempos inmemoriales.
San Roque es llevado por sus parroquianos con un paso peculiar, con el orden y respeto debidos, y al son de la buena gaita gallega, que deleita en todo su recorrido al Santo, a sus fervorosos vecinos, danzantes del grupo local,"AREAS DO MAR" y amigos de la salerosa villa marinera durante todo el trayecto procesional. Es curioso pero la comitiva va por algunas calles pintadas, ya que el recorrido es el mismo donde se realizan las famosas alfombras florales de Ares en la fiesta del Corpus Christi, cada año. Por obra y gracia de los vecinos que colaboran en su preparación vistiendo y engalanando las calles de flores con mucho esmero para que luzcan de impresión en tal acontecer y asombren a los numerosos visitantes que recibe la villa cada año.
Durante la procesión de San Roque se forman tres filas que quieren ser perfectas con el público a cada lado, San Roque y sus portadores en el centro, seguido del grupo "Areas Do Mar" en buena sintonía con la gaita gallega. Al llegar a la playa, al Santo lo reciben con cohetes en signo de alegría y regocijo. Y una vez de vuelta a la iglesia de donde partió, el grupo de danzas baila en su honor ofreciendo un recital con un variado y cuidado repertorio, tanto infantil como juvenil.
Después de los vistosos bailes, tiene lugar el reparto de las uvas bendecidas durante la celebración eucarística para los asistentes a la fiesta.
Un año más la danza deleitó a su público y cosechó grandes aplausos por su buen hacer musical.