EL ESPACIO FÍSICO DEL CARTEL
Fíjate que yo había dicho, menos mal que al menos han arreglado la pared de Jesús. Y que va, nada más alejado de la realidad, aquí en Tardajos tenemos que ser Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como. Como esperemos que las autoridades nos resuelvan los problemas lo tenemos claro. Chica, que tienes ratas, y de todos los tamaños, pues les pones trampas y veneno. Por cierto, se me ha acabado el veneno y a lo mejor por eso no descubro más ratas muertas. Que debajo de tu casa hay un afluente de agua, pues hace ya mucho tiempo, como le dije a Salva, tengo una motobomba. A Salva por activa y por pasiva le he contado mis problemas vecinales, de las ratas, de las aguas, que se turnan, y menos mal que ahora son cristalinas que ayer mismo lo vi con mis propios ojos cuando le tuve que dar un pequeño empujoncito a mi motobomba, un pequeño golpe de pie, y se pone a funcionar como una campeona. ¡Menudo arroyo fluye en mi propia casa! Porque me canso de decir que se puede hacer y nadie me hace caso. Es un agua que se está desaprovechando, ¿y si es del caudal público? Aquí las autoridades prefieren decir, ¿Y si no? Y yo digo, ¿Y si si? Total que no lo quieren averiguar, y sería la solución para las ratas, tapando por donde entran, y para el ayuntamiento que tendría más agua que ahora se va a lo tonto me lo bailo.
Que no se me despiste, que mira que no he criticado de la Comunidad de Regantes, pero lo mismo, no a la persona, sino a lo sucedido. Y Salva me saluda y si le pedimos que nos are el huerto, lo hace. Eso sí, favor por favor, se lo agradecemos, porque nosotros, otra cosa no será, pero somos muy buenos pagadores. De lo bueno y de lo malo. Y que tengamos un huerto como el nuestro se lo debemos a él y a Neo. Que lo cortés no quita lo valiente.
Total que el ayuntamiento no ha arreglado la pared de mis vecinos. Ha sido Jesús, el que lo ha hecho. Igual a otros les asfaltan las calles, sus trocitos particulares, como le ha pasado al Robertillo, pero para eso tienen que ser concejales. Que uno de a pie, ya puede pudrirse antes que el ayuntamiento haga algo por él.
Y la guerra, sigue, los chicos se creen en su derecho de estar ahí a su puerta hasta las tantas, de Jesús y de María. Y dejando sus desperdicios. Si les ha dicho Gonzalo que no dejen botellas, y parece que hasta le han hecho caso, pero menudo comedero de pipas que dejan. Y luego que las barra la vecina, a la misma que molestan. Y María ha dicho que lo siente pero que sean los chicos los que lo limpien.
Así andamos por Tardajos. Que por mucha gloria que luego quieran vender, aquí no hay más cera que la arde. Y no será otra cosa, pero cera les voy a dar para que brille toda su pletórica legislatura. O mucho tendrían que cambiar y la pinta no es nada buena.
Fíjate que yo había dicho, menos mal que al menos han arreglado la pared de Jesús. Y que va, nada más alejado de la realidad, aquí en Tardajos tenemos que ser Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como. Como esperemos que las autoridades nos resuelvan los problemas lo tenemos claro. Chica, que tienes ratas, y de todos los tamaños, pues les pones trampas y veneno. Por cierto, se me ha acabado el veneno y a lo mejor por eso no descubro más ratas muertas. Que debajo de tu casa hay un afluente de agua, pues hace ya mucho tiempo, como le dije a Salva, tengo una motobomba. A Salva por activa y por pasiva le he contado mis problemas vecinales, de las ratas, de las aguas, que se turnan, y menos mal que ahora son cristalinas que ayer mismo lo vi con mis propios ojos cuando le tuve que dar un pequeño empujoncito a mi motobomba, un pequeño golpe de pie, y se pone a funcionar como una campeona. ¡Menudo arroyo fluye en mi propia casa! Porque me canso de decir que se puede hacer y nadie me hace caso. Es un agua que se está desaprovechando, ¿y si es del caudal público? Aquí las autoridades prefieren decir, ¿Y si no? Y yo digo, ¿Y si si? Total que no lo quieren averiguar, y sería la solución para las ratas, tapando por donde entran, y para el ayuntamiento que tendría más agua que ahora se va a lo tonto me lo bailo.
Que no se me despiste, que mira que no he criticado de la Comunidad de Regantes, pero lo mismo, no a la persona, sino a lo sucedido. Y Salva me saluda y si le pedimos que nos are el huerto, lo hace. Eso sí, favor por favor, se lo agradecemos, porque nosotros, otra cosa no será, pero somos muy buenos pagadores. De lo bueno y de lo malo. Y que tengamos un huerto como el nuestro se lo debemos a él y a Neo. Que lo cortés no quita lo valiente.
Total que el ayuntamiento no ha arreglado la pared de mis vecinos. Ha sido Jesús, el que lo ha hecho. Igual a otros les asfaltan las calles, sus trocitos particulares, como le ha pasado al Robertillo, pero para eso tienen que ser concejales. Que uno de a pie, ya puede pudrirse antes que el ayuntamiento haga algo por él.
Y la guerra, sigue, los chicos se creen en su derecho de estar ahí a su puerta hasta las tantas, de Jesús y de María. Y dejando sus desperdicios. Si les ha dicho Gonzalo que no dejen botellas, y parece que hasta le han hecho caso, pero menudo comedero de pipas que dejan. Y luego que las barra la vecina, a la misma que molestan. Y María ha dicho que lo siente pero que sean los chicos los que lo limpien.
Así andamos por Tardajos. Que por mucha gloria que luego quieran vender, aquí no hay más cera que la arde. Y no será otra cosa, pero cera les voy a dar para que brille toda su pletórica legislatura. O mucho tendrían que cambiar y la pinta no es nada buena.